La báscula es el temor de muchas personas. En tanto, hay otras que se pesan varias veces al día, lo cual puede ser un indicio de trastorno alimenticio. Hacerlo frecuentemente puede pasar a convertirse en una obsesión constante y generar problemas como la anorexia o la bulimia.
Cuidar la alimentación y la figura son elementos importantes para gozar de una buena autoestima y, sobre todo, para fortalecer nuestra salud. Sin embargo, debemos evitar ser demasiado estrictos y obsesivos con nuestro cuerpo, pues ello puede llevarnos a realizar dietas exageradas y desarrollar problemas alimenticios graves.
Expertos en temas de nutrición y salud señalan que cuando una persona se pesa diariamente, se mira en el espejo y el exceso de grasa que observa puede desencadenar sentimientos negativos. Angustia, ansiedad y depresión son los más frecuentes, y pueden desarrollar trastornos severos en las personas.
Es cierto que la báscula es un instrumento para mantener nuestro peso ideal. Para Diego Gómez, vocero de Fitforbeach, hoy en día tenemos básculas inteligentes que no solo reportan el peso, sino la cantidad de grasa corporal y mantienen conectividad Bluetooth, de modo que el puede recibir toda la información en su teléfono. No obstante, la obsesión por bajar de peso de prisa o revisar constantemente las cifras puede arraigar pensamientos negativos en la persona.
Quienes se pesan constantemente, se miran los kilos de más que tienen en el cuerpo y no tienen la oportunidad de acudir con un nutricionista, ingresan a un círculo vicioso donde su única salida son las dietas drásticas, las cuales también pueden conllevar a problemas de salud debido a la brusca pérdida de peso.
¿Qué hacer al respecto? Preocuparse por cómo nos vemos es un elemento importante, pues nuestra apariencia física dice mucho de nosotros, pero lo más importante es que es un reflejo de nuestra salud, de cómo nos sentimos. Si estamos obsesionados por lucir más delgados o ganar peso, es necesario recibir la orientación adecuada de un especialista. Nuestra calidad de vida influye en todas las actividades que realizamos.
Por eso, es importante reflexionar si nos pesamos y medimos constantemente. También debemos hacer una autoevaluación si cuando lo hacemos nos invade la depresión o angustia. Además, el humor de las personas que se pesan suele cambiar, por lo que debemos evaluar si nuestra actitud depende del peso que dicta la báscula.
Los trastornos alimenticios son bastante frecuentes, desde adolescentes hasta personas adultas. Es importante tratarlos a tiempo, pues podemos ocasionar deshidratación en el cuerpo, pérdida de músculos, debilidad ósea, entre otros problemas. Estas consecuencias están asociadas a enfermedades más graves, de modo que el tratamiento oportuno puede prevenir afecciones complicadas que amenacen nuestra salud. Además, acudir al nutricionista nos permitirá seguir una dieta saludable de acuerdo con nuestras condiciones individuales de acuerdo con la edad, género, etc.